martes, 17 de noviembre de 2009

Noticias de la ECMC



En el siglo XXI, a la gente leather de hoy, con toda la libertad de comunicación, tanto en palabras como en imágenes que provee Internet, le resulta imposible comprender cuan dificultoso era encontrar a otros con el mismo interés en la década de 1950.
Dado que ser gay fue un crimen en muchos países, punible con años de prisión o incluso con la ejecución, y la simple sospecha de ser homosexual implicaba la posibilidad de perder el trabajo o de ser golpeado, fue extremadamente peligroso arriesgarse a una exposición.
Y entonces cómo se podía encontrar la gente gay leather?
Afortunadamente había un bastión de hombres en el que vestir cuero era totalmente aceptado. Tanto en EE.UU. como en Europa el uso de ropas de cuero por parte de los motociclistas fue reconocido incluso antes de la década de 1920, como una protección necesaria para un deporte de esas características. Entonces, no debe sorprender que esa primera gente gay leather encontrara en las motos la llave de su emancipación. Participar en los encuentros de motociclistas brindaba la posibilidad de compartir con hombres en cuero y que una conversación derivara en mucho más.
Para aquellos que podían comprar una moto, el paso siguiente fue acercarse a los cafés y bares patrocinados por moteros.
Y hay solo un paso entre esos encuentros y la fundación de clubs de motociclistas gay.
Clubs de ese tipo se fundaron en los EE.UU. a mediados de los 50, aún antes de que abrieran la mayoría de los bares gay leather. En Europa aparecieron bastante más tarde. El 69-Club en Londres fue el primero en 1965, y esto sucedió tres años antes de que la homosexualidad fuera descriminalizada en el Reino Unido.

En 1974 fue el momento correcto para la fundación de la "European Confederation of Motorcycle Clubs - ECMC” (Confederación Europea de Clubs de Motociclistas). Los miembros fundadores fueron seis clubes, tres del Reino Unido, uno de Holanda, uno de Bélgica y uno de Suiza. Más tarde se unieron otros tres clubes de Alemania, Bélgica y Dinamarca, y otros mostraron su interés en unirse más tarde. Durante la década del 70 muchos clubes de toda Europa siguieron ese camino. Actualmente, la ECMC tiene más de 40 clubes miembros de dieciséis países.